
Por lo general, lo morboso se asocia a lo sexual. De ahí que se mencionen las miradas y las insinuaciones morbosas. Sin embargo, también es usual que se califiquen como morbosas otro tipo de conductas. Por ejemplo, cuando alguien quiere conocer en detalle la vida personal o íntima de alguien. Por extensión, definimos como morbo todo aquello que nos remite a la enfermedad mental.
Que algo no sea claro y exequible nos resulta a veces un acicate, sobre todo cuando se refiere al sexo El deseo es un auténtico cóctel químico. Para las mujeres, sin embargo, depende de las fluctuaciones hormonales. Ellas suelen sentir una mayor inclinación a buscar encuentros sexuales durante el periodo de ovulación o incluso durante la regla. Pero hay que reconocer que depende de cada mujer; si les preguntas directamente, cada una te puede dar una respuesta distinta. Acudir directamente a la caza de antedicho deseo nos puede llevar a no encontrarlo. Sin embargo, no todo es terreno baldío. El equivalente de Ashley Madison en el país transalpino realizó un estudio con una sorprendente muestra de diez millones de personas, baza hombres como mujeres. En conclusión, ellas tienden a optimizar los recursos de los que ya disponen variando el placer e incluyendo nuevos matices.
Por complejos, una sociedad machista y opresiva y distintos posos de una adiestramiento demasiado puritana en ocasiones ha dejado tradicionalmente a la mujer al acera de la liberación sexual. Pero actualidad en día la mujer ya compite -casi- en el mismo plano que el hombre en el campo del sexo. Los libros de la dinastía '50 sombras de Grey' rompió muchos esquemas a algunos hombres, que pensaban que las mujeres eran meras muñequitas a las que dominar en la cama. A veces, por miedo a no ser comprendida por otras mujeres. En otras ocasiones, por miedo a causar extrañeza en su pareja venéreo, ya sea un hombre u otra mujer